En Madrid el ejército saldrá a las calles ante aumento de casos de COVID-19

Las cosas no andan bien en España, de manera específica en Madrid, donde las autoridades de Salud ya pidieron paro al Ministerio de Defensa para que el ejército ayude en la lucha contra la pandemia de COVID-19. ¿Cómo lo hará?

El plan es que el ejército le eche una mano al gobierno de Madrid en la vigilancia de las zonas de alto contagio y verificando que la gente que cumpla con las medidas de restricción aplicadas para evitar los casos de coronavirus, después de que una parte de la población mostrara su descontento ante el aumento de los casos y otra más saliera a las calles a manifestarse por el derecho a NO usar los cubrebocas.

El ejército saldrá a las calles de Madrid

Ya lo dijo Salvador Illa, ministro de Sanidad, al advertir que se aproximan semanas difíciles en Madrid. De acuerdo con el ministro, la población y las autoridades deben controlar la pandemia en la capital de España y para que eso sea una realidad, el Ministerio de Defensa desplegará al ejército en las calles, a partir del lunes 28 de septiembre.

De acuerdo con Margarita Robles, ministra de Defensa, siete mil 500 soldados están disponibles para ayudar a contener la proliferación de casos de coronavirus.

Además, Madrid está por anunciar nuevas medidas en las zonas que más contagios han registrado —pues tras pasar el primer ciclo de la epidemia, España comenzó a registrar un aumento de casos de coronavirus, aunque no de letalidad. Entre otras cosas, porque los afectados son ahora en su mayoría jóvenes o personas sin comorbilidades.

Lo cierto es que Madrid no es la única ciudad que se prepara ante el incremento de casos. Si bien en Barcelona la situación no es la misma, las autoridades ya estudian un plan para evitar replicar el caso de la capital española.

Vale recordar que desde agosto, España ya observaba que tras pasar el primer ciclo de la epidemia, las cosas no iban del todo bien.

Y para asegurarse de que no se repitiera la situación del colapso en hospitales y propagación del COVID-19, emitió órdenes restrictivas como la prohibición del cigarro así como el consumo de bebidas alcohólicas en espacios públicos, el uso obligatorio del cubrebocas y horarios especiales para los restaurantes.

Sin embargo, estas restricciones no le gustó a una parte de la población, que salió a las calles a manifestarse con el argumento de que el COVID-19 y el desarrollo de la vacuna era una trampa de Bill Gates para conformar un nuevo orden mundial.

Con información de Sopitas