México respalda la demanda de EU a Texas por la ley que le permite a autoridades locales detener y expulsar migrantes

El gobierno de México, a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), ha respondido de manera positiva a la demanda presentada por el Departamento de Justicia de Estados Unidos contra la ley SB4 de Texas. Esta ley, firmada por el gobernador Greg Abbott en diciembre de 2023 y programada para entrar en vigor en marzo de este año, otorga a las autoridades estatales la capacidad de expulsar a migrantes del país, una prerrogativa que corresponde exclusivamente al gobierno federal.

El comunicado de la Cancillería mexicana expresa el rechazo hacia esta medida antimigrante, que busca detener el flujo de personas migrantes criminalizándolas, fomentando la separación de familias y propiciando la discriminación y el perfilamiento racial, acciones que atentan contra los derechos humanos de la comunidad migrante, según el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Desde el año pasado, la Secretaría de Relaciones Exteriores instruyó a la red consular en Texas para fortalecer sus medidas de protección, con el objetivo de defender los derechos de los 11 millones de mexicanos que residen en dicho estado.

El gobierno de México rechaza de manera contundente cualquier medida que genere ambientes hostiles propensos a actos o crímenes de odio contra las comunidades migrantes y que contemple el retorno involuntario de personas sin respetar el debido proceso, según se destaca en el comunicado.

Se informa que la Cancillería seguirá de cerca el proceso iniciado por el gobierno del presidente Joe Biden. La demanda del Departamento de Justicia, presentada en un tribunal federal en Austin, busca que la corte declare inconstitucional la ley de Texas, argumentando que las leyes federales tienen primacía sobre las estatales.

La semana pasada, el Departamento de Justicia envió una carta a Abbott amenazando con emprender acciones legales a menos que Texas revierta la medida. En respuesta, Abbott señaló que el gobierno federal “no solo se niega a aplicar las leyes actuales de migración, sino que ahora quiere impedir que Texas aplique leyes contra la migración ilegal”.