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¿Por qué es polémica la elección de Arabia para el Mundial del 2034?

El Mundial del 2034 ya tiene sede. Sólo pasaron dos semanas de diferencia respecto al anuncio de FIFA sobre la celebración de la Copa del Mundo del 2030 entre Sudamérica, Europa y África, para que se resolviera la sede del 2034, en Arabia Saudita, mientras que aún no se sabe donde se celebrará el Mundial Femenil del 2027. 

Gianni Infantino, presidente de la FIFA, sabía que la elección de Arabia sería polémica y controvertida a tal grado que clausuró la opción de realizar comentarios en sus redes sociales antes de compartir un mensaje en el que adelantaba que Arabia sería la sede de la Copa del Mundial del 2034. 

“Tres ediciones, cinco continentes y diez países involucrados en la organización de partidos del torneo: ¡eso hace que el futbol sea verdaderamente global!”, publicó el directivo. 

De Arabia se ha escuchado mucho en los últimos años en materia deportiva, pero especialmente en 2023 tras el fichaje de Cristiano Ronaldo con el Al-Nassr y después la serie de fichajes mediáticos de otros clubes como el de Karim Benzema, Neymar, Sadio Mané y Roberto Firmino.

Fuera del futbol, Arabia firmó un contrato por 10 años con Fórmula 1 para celebrar un Gran Premio al año a cambio de 650 millones de dólares a través del Fondo de Inversión Pública, manejado por el príncipe heredero, Abdulaziz bin Turki al Faisal, que a la vez privatizó a los cuatro principales equipos de futbol para realizar fichajes bomba.

El mismo Fondo de Inversión Pública es el que está detrás de la compra y administración del Newcastle en la Premier League, sin embargo, la polémica no radica principalmente en el tema de la inversión en materia deportiva, sino en lo que rodea a Arabia en términos de derechos humanos.

FIFA ha manejado un discurso de inclusión, empatía y unión. Ha realizado campañas para erradicar el racismos y constantemente castiga a la Federación Mexicana de Futbol por los gritos homofóbicos cuando el portero rival despeja, sin embargo, eligió a Arabia como sede del Mundial del 2034 pese a las múltiples e históricas denuncias sobre derechos humanos. 

De a cuerdo con The Athletic, Amnistía Internacional reportó más de 100 ejecuciones en los primeros 10 meses del 2023. Además, desde 2020 Arabia es sede de la Supercopa de España tras un acuerdo alcanzado con Luis Rubiales, ex presidente de la Federación Española de Futbol e inhabilitado por la propia FIFA durante un periodo de tres años por su comportamiento en la final del Mundial Femenil, tras besar en la boca a Jennifer Hermoso. 

Durante la Supercopa de España celebrada en Arabia, las mujeres han encontrado limitantes para ver los partidos de futbol. Las tomas de televisión, por ejemplo, pocas veces muestran presencia femenil en las tribunas. 

Aquí algunos datos que convierten a Arabia en una sede polémica para llevar a cabo el Mundial del 2034.

  • En 2023 se realizaron más de 100 ejecuciones hasta el mes de octubre
  • Los derechos de las mujeres aún son subordinados por los derechos de los hombres. 
  • Las relaciones sexuales fuera del matrimonio son consideradas un delito 
  • La comunidad LGBTQ+ es discriminada por ley y castiga hasta con pena de muerte
  • La libertad de prensa es limitada, sobre todo si se trata de criticar al gobierno. En 2018, por ejemplo, agentes asesinaron y desmembraron al periodista Jamal Khashoggi.
  • Criticar al gobierno es un delito que se castiga con arrestos domiciliarios, prisión y/o tortura. 

Arabia y Qatar son países colindantes y comparten varias aspectos, tanto en lo político como religioso, pero también comparten clima. Si en el caso de Qatar se optó por celebrar el Mundial durante el invierno por las altas temperaturas en verano, en Arabia Saudita hace más calor todavía, por lo cual se podría optar por celebrar la Copa del Mundo en invierno. 

En promedio, en Arabia se alcanzan máximas de 43 grados centígrados y mínimas de 30. ¡Sí, mínimas de 30 grados centígrados! 

Al igual que en Qatar, la economía de Arabia depende mucho de inmigrantes, y el trato es malo. Cerca de 13.4 millones de inmigrantes trabajan bajo condiciones climáticas inadecuadas, sin la protección de derechos humanos. 

Con información de Sopitas

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