Internacional
Repatriaciones, cuarentena y medidas especiales ante avance de coronavirus

Varios países han decidido repatriar a sus ciudadanos ante la emergencia sanitaria en China
A pesar de la recomendación de la Organización Mundial de la Salud de no mover personas entre países, varios Estados han decidido repatriar a sus ciudadanos
De los 7 mil 711 infectados por el virus del coronavirus en China se encuentran 1370 en estado de salud grave, mientras que la cifra de muertes sólo en el país asiático alcanzó más de 170 al 30 de enero de 2020. Sólo 124 personas han sido dadas de alta tras superar la enfermedad. Estas cifras son proporcionadas por la Comisión Nacional de Sanidad de China
Hasta el momento se tiene el reporte de que por lo menos 20 países han confirmado casos del coronavirus de Hubei, China. Aun cuando Asia ha sido el continente más afectado, el virus ha logrado desplazarse a través del globo llegando a América del Norte, Europa y Oceanía.
Países de todo el mundo continúan realizando acciones para salvaguardar a sus ciudadanos. Estados Unidos y Japón, por ejemplo, han evacuado del foco de infección a los civiles que cuenten con su nacionalidad. Francia también ha decidido repatriar a alrededor de 350 europeos que actualmente se encuentran en China. Por su parte, Australia está estudiando el caso y de ser necesario repatriará a sus ciudadanos colocándolos en cuarentena en la Isla de Navidad en el Océano Índico.
En Reino Unido, Alemania e Indonesia se han cancelado todos los vuelos a China, Mongolia cerró sus carreteras con China, mientras que en Londres se tomó la decisión de poner en cuarentena de 14 días a todos los viajeros provenientes de Wuhan. Para el caso de España, se pretende mantener aislados a los repatriados en un hospital de Madrid mientras se descarta hayan adquirido la infección; quienes queden aislados tendrán todas las comodidades posibles para enfrentar la situación.
Mientras tanto, en países latinoamericanos se están tomando algunas decisiones distintas, tal es el caso de Ecuador en donde la Cancillería dijo que no se repatriarán a los nueve ecuatorianos encontrados en China por motivos de estudios, esto debido al apego de las recomendaciones de las instituciones del país asiático y de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de no movilizar a la gente de un país a otro.
“La coordinación con ellos (residentes y autoridades) es abierta. Nuestros compatriotas, en especial los nueve estudiantes que están en Wuhan (localidad en la que se registró los primeros casos de esta nueva cepa), están bien y eso es lo más importante”, dijo el canciller ecuatoriano José Valencia a la prensa.
Canadá, por su parte, ha confirmado su tercer paciente con coronavirus y han tomado la decisión de también repatriar a sus ciudadanos.
Argentina también está pendiente de la situación de los 12 de sus ciudadanos que se encuentran en cuarentena en China. “Mi vida cambió cien por ciento. El encontrarse con amigos, salir a tomar un café o a cenar, por el momento está todo cancelado. Cambió bastante el día a día”, comentó una de las estudiantes aisladas a medios en una entrevista.
Bolivia, a través del ministro de Salud, Aníbal Cruz, aseguró que cuenta con todos los mecanismos para contener una emergencia sanitaria y además, se han implementado medidas de información y educación en aeropuertos.
No repatriar a ciudadanos a sus respectivos países fue una de las recomendaciones de la OMS, sin embargo, cada día son más las naciones que deciden retirar de China a su gente. Estas medidas especiales, contradictorias a la Organización Mundial de la Salud podrían poner en riesgo a otras naciones y no contribuir en la contención de coronavirus.
Internacional
¿Qué significa y quiénes se verán afectados con el posible cierre de Gobierno en Estados Unidos?

Estados Unidos se encamina hacia un cierre de Gobierno este fin de semana que podría perturbar muchos servicios gubernamentales, presionar a los empleados federales y agitar la política mientras los republicanos en la Cámara de Representantes, impulsados por demandas de la extrema derecha de recortar los presupuestos, fuerzan una confrontación sobre el gasto federal.
Si bien algunas entidades gubernamentales estarán exentas —por ejemplo, los cheques del Seguro Social seguirán emitiéndose— otras funciones se verán gravemente restringidas. Las agencias federales suspenderán todas las acciones consideradas no esenciales, y muchos de los aproximadamente 2 millones de empleados del gobierno federal, así como 2 millones de militares y reservistas en servicio activo, no recibirán cheques de pago.
Un vistazo a lo que se espera si el Gobierno estadounidense cierra el domingo.
¿Qué es un cierre de Gobierno?
Un cierre de gobierno ocurre cuando el Congreso no logra aprobar un plan de financiamiento que sea promulgado por el presidente. Se supone que los legisladores deben aprobar 12 proyectos de gastos para financiar agencias de todo el gobierno, pero el proceso lleva mucho tiempo. A menudo aprueban extensiones temporales —llamadas resoluciones continuas o CR— para permitir que el gobierno siga funcionando.
Cuando no se promulga un presupuesto, las agencias federales frenan todo trabajo no esencial y no envían cheques de pago mientras dura el cierre.
Aunque los empleados considerados esenciales para la seguridad pública, como los controladores de tráfico aéreo y los agentes del orden, todavía tienen que presentarse a trabajar, otros empleados federales permanecen de licencia. Según una ley de 2019, esos trabajadores reciben pagos atrasados una vez que se soluciona el tema presupuestario.
¿Cuándo inicia y cuánto dura el cierre de Gobierno?
La financiación gubernamental expira el 1 de octubre, cuando inicia del año presupuestario federal. Un cierre comenzará a las 12:01 a.m. del domingo si el Congreso no puede aprobar un plan de financiamiento que el presidente promulgue.
Es imposible predecir cuánto duraría un cierre. El Senado, controlado por los demócratas, y la Cámara de Representantes, controlada por los republicanos, están trabajando en planes muy diferentes para evitar un cierre, y el presidente de la cámara baja, Kevin McCarthy, está luchando por ganar apoyo de los conservadores de extrema derecha para mantener abierto el gobierno.
Muchos se están preparando para un cierre que podría durar semanas.
¿A quién afecta un cierre?
Millones de trabajadores federales enfrentan retrasos en sus cheques de pago cuando el gobierno cierra, incluidos muchos de los aproximadamente 2 millones de personal militar y más de 2 millones de trabajadores civiles en todo el país. Para muchos trabajadores, el primer día de pago que perderían es el 13 de octubre.
Casi el 60 por ciento de los trabajadores federales están destinados en los departamentos de Defensa, Asuntos de Veteranos y Seguridad Nacional.
Si bien las tropas en servicio activo y los reservistas del ejército continuarían trabajando, más de la mitad de la fuerza laboral civil del Departamento de Defensa —unas 440 mil personas— estaría en licencia.
En todas las agencias federales, los trabajadores están destinados en los 50 estados y tienen interacción directa con los contribuyentes, desde agentes de la Administración de Seguridad del Transporte que operan la seguridad en los aeropuertos hasta trabajadores del Servicio Postal que entregan el correo.
El secretario de Transporte, Pete Buttigieg, ha dicho que se suspenderá la nueva capacitación para controladores de tráfico aéreo. Incluso un cierre que dure unos días significará que el departamento no alcanzará sus objetivos de contratación y dotación de personal para el próximo año, dijo.
Más allá de los trabajadores federales, un cierre podría tener efectos de largo alcance en los servicios gubernamentales. Las personas que solicitan servicios gubernamentales como ensayos médicos clínicos, permisos de armas de fuego y pasaportes podrían sufrir retrasos.
Los programas Head Start que atienden a más de 10 mil niños desfavorecidos perderían inmediatamente fondos federales
Los parques nacionales cerrarán el lunes 2 de octubre si el gobierno inicia un cierre, y el Servicio de Parques Nacionales dijo que sus servicios no estarán disponibles.
Algunas oficinas federales también tendrán que cerrar o enfrentarse a horarios reducidos en caso de un cierre.
Las empresas estrechamente relacionadas con el gobierno federal, como los contratistas federales o los servicios turísticos alrededor de los parques nacionales, podrían sufrir interrupciones. El sector de viajes podría perder 140 millones de dólares diarios en un cierre, según la Asociación de la Industria de Viajes de Estados Unidos.
Los legisladores también advierten que un cierre podría sacudir los mercados financieros. Goldman Sachs ha estimado que un cierre reduciría 0.2 por ciento el crecimiento económico cada semana que dure, pero se recuperaría una vez que el gobierno reabra.
Otros dicen que la interrupción de los servicios gubernamentales tiene impactos de largo alcance porque socava la confianza en el gobierno para cumplir con sus deberes básicos. La Cámara de Comercio de Estados Unidos advirtió: “Una economía que funciona bien requiere un gobierno que funcione”.
¿Qué pasa con los casos en Tribunales, el Congrespo y el salario presidencial?
El presidente y los miembros del Congreso seguirán trabajando y cobrando. Sin embargo, cualquier miembro de su personal que no se considere esencial estará de licencia.
La Corte Suprema, que comienza su nuevo periodo de sesiones el lunes, no se vería afectada por un cierre breve porque puede recurrir a dinero proveniente de cuotas judiciales, como cobros por presentar demandas y otros documentos, dijo la portavoz del tribunal Patricia McCabe.
El resto del poder judicial federal también funcionará normalmente durante al menos las dos primeras semanas de octubre, dijo Peter Kaplan, portavoz del poder judicial.
Incluso en un cierre más prolongado, todo el poder judicial no cerraría, y cada tribunal del país tomaría decisiones sobre qué actividades continuarían. Los magistrados y todos los jueces federales seguirían recibiendo su remuneración debido a la prohibición constitucional de reducir el salario de los jueces durante su mandato, según el Servicio de Investigación del Congreso.
En particular, la financiación de los tres fiscales especiales nombrados por el secretario de Justicia, Merrick Garland, no se vería afectada por un cierre del gobierno porque se pagan mediante una asignación permanente e indefinida, un área que ha estado exenta de cierres en el pasado.
Eso significa que los dos casos federales contra Donald Trump, el expresidente, así como el caso contra Hunter Biden, el hijo del presidente Joe Biden, no serían interrumpidos.
Trump ha exigido que los republicanos retiren los fondos de los procesamientos en su contra como condición para financiar al gobierno, declarándolo su “última oportunidad” de actuar.
¿Ya se ha cerrado el Gobierno de Estados Unidos antes?
Antes de la década de 1980, la falta de acuerdos presupuestales no resultaba en cierres significativos de las operaciones gubernamentales. Pero entonces el secretario de Justicia, Benjamín Civiletti, en una serie de opiniones jurídicas de 1980 y 1981, argumentó que las agencias gubernamentales no podían operar legalmente durante un déficit de financiación.
Desde entonces, los funcionarios federales han actuado bajo el entendimiento de que pueden hacer exenciones para funciones que son “esenciales” para la seguridad pública y los deberes constitucionales.
Desde 1976, ha habido 22 déficits de financiación, 10 de los cuales han provocado el despido de trabajadores. Pero la mayoría de los cierres importantes han tenido lugar desde la presidencia de Bill Clinton, cuando el entonces líder de la Cámara de Representantes, Newt Gingrich, y su mayoría conservadora exigieron recortes presupuestarios.
El cierre gubernamental más largo ocurrió entre 2018 y 2019, cuando el entonces presidente Trump y los demócratas del Congreso entraron en un enfrentamiento porque el mandatario pedía financiación para un muro fronterizo. La interrupción duró 35 días, durante la temporada navideña, pero también fue sólo un cierre parcial porque el Congreso había aprobado algunos proyectos para financiar partes del gobierno.
¿Cómo se soluciona un cierre en el Gonbierno de EU?
Es responsabilidad del Congreso financiar al gobierno. La Cámara de Representantes y el Senado tienen que acordar financiar al gobierno de alguna manera, y el presidente tiene que convertir la legislación en ley.
Las dos partes están profundamente arraigadas y no están ni cerca de llegar a un acuerdo para evitar un cierre.
Pero si el cierre dura semanas, aumentará la presión para poner fin al estancamiento, particularmente si los militares en servicio activo se quedan sin sus pagos del 13 de octubre o el 1 de noviembre.
El Congreso a menudo depende de las llamadas resoluciones continuas (RC) para proporcionar dinero provisional para dejar abiertas oficinas gubernamentales en los niveles actuales mientras se llevan a cabo las negociaciones presupuestarias.
El dinero para prioridades nacionales apremiantes, como la asistencia de emergencia para las víctimas de desastres naturales, suele ir adjunto a una iniciativa de ley de corto plazo.
Pero los republicanos intransigentes dicen que cualquier proyecto de ley temporal es imposible para ellos. Están presionando para mantener cierre hasta que el Congreso negocie los 12 proyectos de ley que financian al gobierno, lo que históricamente es una tarea laboriosa que no se resuelve hasta diciembre, como pronto.
Trump, que es el principal rival de Biden de cara a las elecciones de 2024, está instando a los republicanos intransigentes.
Si tienen éxito, el cierre podría durar semanas, tal vez incluso más.
Con información de AP
Internacional
Trabajadores de casinos de Las Vegas también consideran entrar en huelga

Los trabajadores del Strip de Las Vegas (Nevada, EU), la avenida que concentra la mayoría de casinos y hoteles de la ciudad, votaron a favor de dar libertad a los sindicatos para que convoquen una huelga para mejorar sus condiciones laborales.
El 95% de los afiliados al sindicato de trabajadores culinarios y camareros dieron permiso a sus líderes sindicales para convocar una huelga en caso de que fracasen las negociaciones que se están llevando a cabo con las empresas de casinos y hoteles.
No hay una fecha fijada para el paro laboral, que en caso de convocarse podría congregar a 53,000 amas de llaves, camareros y otros empleados del famoso Strip de Las Vegas, informó el periódico Wall Street Journal.
El sindicato está negociando un nuevo convenio colectivo de cinco años con MGM Resorts, Caesars Entertainment Corporation y Wynn/Encore Resorts, los mayores propietarios de casinos de la ciudad.
Desde el 15 de septiembre, 40,000 empleados de 22 casinos de Las Vegas están trabajando bajo un convenio colectivo caducado, denunció el sindicato en un comunicado.
Trabajadores de casinos de Las Vegas también consideran entrar en huelga
Los trabajadores piden aumentos salariales, reducir la carga de trabajo en la limpieza de habitaciones y una mejor protección frente a agresiones y acoso de los clientes, entre otras demandas.
“Tantos meses de negociaciones ya son suficientes. Necesitamos avanzar” declaró en redes sociales Ted Pappageorge, tesorero de la organización sindical.
Entre los hoteles y casinos que podrían ir a huelga hay varios emblemáticos como Bellagio, Excalibur, Caesars Palace, Flamingo, París o Planet Hollywood.
El sindicato advirtió a las empresas de que tiene una “larga historia de huelgas exitosas”. La última fue en 1991 cuando 500 trabajadores del casino Frontier de Las Vegas pararon durante más de seis meses hasta lograr una subida salarial.
La amenaza de huelga en Las Vegas se suma a otros paros laborales activos como el de la industria del automóvil en Detroit, donde el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se sumó el martes a los piquetes sindicales para mostrar su apoyo a las demandas de los trabajadores.
Además, los guionistas de Hollywood levantaron este miércoles la huelga que mantenían desde mayo tras haber logrado un nuevo convenio con los productores de cine y televisión, aunque los actores siguen todavía en paro laboral.
Con información de EFE y Forbes
Internacional
Donald Trump y sus hijos son declarados responsables de fraude

Con el fallo de un juez de Nueva York, se puede asegurar que Donald Trump y sus hijos cometieron fraude al recurrir a inflar sus cuentas para obtener créditos bancarios.
De acuerdo con El País, la decisión del juez Arthur Engoron rechaza la desestimación de la demanda civil por fraude entablada por la fiscal general de Nueva York, Letitia James, la cual llegará a su etapa de juicio civil en unos días.
En dicho juicio (sin jurado), Donald Trump y sus hijos (sólo Donald Jr y Eric Trump) serán acusados de mentir a lo largo de varios años sobre el valor de los activos y su patrimonio neto. Mentiras que el expresidente y su emporio hicieron con el único fin de obtener mejores condiciones en préstamos bancarios y seguros.
Donald Trump y sus hijos son “ responsables jurídicamente de violaciones persistentes” de la ley estatal de Nueva York, señaló el juez Engoron, en cita recogida por CNN.
Como ha ocurrido con las otras acusaciones que tiene en su contra, el expresidente de Estados Unidos aseguró que este nuevo golpe legal en su contra es porque se está perfilando para llegar a la Casa Blanca.
El juez sólo “está cumpliendo órdenes (…) la acción de hoy es una refutación de mi condición como principal aspirante a ser presidente de Estados Unidos”, acusó Donald Trump en comunicado difundido tras el fallo en su contra.
Si Donald Trump y sus hijos son hallados culpables en el juicio civil podrían ser castigados con el pago de 250 millones de dólares en daños y perjuicios.
Además, se les impondría una prohibición de cinco años para desempeñar cargos directivos de empresas en Nueva York y, algo que quizás sería el fin del imperio Trump: sus compañías no podrán realizar transacciones comerciales durante el mismo lapso.
Con información de Sopitas