Kast endurece agenda en Chile: blindaje fronterizo, mano dura y recorte al gasto público

Santiago (EFE).— El ultraderechista José Antonio Kast, ganador de las elecciones presidenciales en Chile, perfila un gobierno de “emergencia” con énfasis en seguridad, control migratorio y austeridad fiscal, inspirado en políticas impulsadas por figuras como Donald Trump y Nayib Bukele.

Durante la campaña, Kast defendió la construcción de muros y zanjas en la frontera, el uso de drones con reconocimiento facial y radares térmicos, así como la expulsión masiva de inmigrantes en situación irregular. Bajo el plan “Escudo Fronterizo”, el republicano plantea barreras de más de cinco metros, sanciones a empleadores que contraten migrantes irregulares y la prohibición de rentar viviendas a personas sin estatus legal. Aunque moderó el tono en el cierre electoral, insistió en “invitarlos a salir” del país.

En seguridad, Kast declaró una “emergencia nacional” y anunció el “Plan Implacable” para cárceles, con un enfoque de mano dura contra el narcotráfico y la economía informal. El mandatario electo sostuvo encuentros con el equipo del presidente salvadoreño Nayib Bukele, cuyo modelo ha sido cuestionado por organismos de derechos humanos. También prometió incrementar el gasto en seguridad, sin detallar montos, y reforzar la persecución del crimen organizado.

En el frente económico, Kast propuso recortar 6.000 millones de dólares del gasto estatal y bajar impuestos, aunque no precisó de qué partidas saldrán los ajustes. En salud, su plan contempla derivar listas de espera a la sanidad privada, fortalecer la atención primaria y el Plan Nacional de Salud Mental. En educación, apuesta por el “derecho de los padres a educar a sus hijos”, con límites al poder de docentes y acciones para reducir el ausentismo escolar.

En vivienda, la “Operación Sitio 3.0” prioriza subsidios para terrenos y construcción. Kast anunció medidas contra campamentos de migrantes irregulares y un esquema de silencio administrativo positivo cuando el Estado no responda a proyectos habitacionales.

En política exterior, el presidente electo se ha mostrado favorable a una intervención militar para derrocar al gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela y ha reconocido afinidad ideológica con el presidente argentino Javier Milei. Además, su eventual llegada al poder abre la posibilidad de un indulto a Miguel Krassnoff, exmilitar condenado por crímenes de lesa humanidad durante la dictadura, lo que anticipa un fuerte debate político y social.

Kast, no obstante, bajó expectativas tras votar y admitió que los problemas estructurales no se resolverán en meses. Chile entra así en una nueva etapa: fronteras más rígidas, tijera fiscal y un Estado con puño cerrado.

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