Internacional
Los programas nucleares de Irán e Israel: ¿qué hay detrás de la escalada bélica en Medio Oriente?
Los recientes ataques de Estados Unidos e Israel contra instalaciones nucleares iraníes han reavivado el debate sobre los programas atómicos de ambos países, sus capacidades reales y los dobles estándares en la comunidad internacional. Mientras Irán insiste en que su programa es pacífico, Israel mantiene uno de los arsenales nucleares más opacos del mundo.
El programa iraní: entre la sospecha y la diplomacia
- Acuerdo de 2015 (JCPOA): Irán aceptó limitar su enriquecimiento de uranio a cambio del levantamiento de sanciones. Sin embargo, tras la salida de EE.UU. en 2018 (ordenada por Trump), Teherán incrementó su producción.
- ¿Armas nucleares?: Según Tulsi Gabbard, directora de Inteligencia de EE.UU., Irán tiene “reservas de uranio sin precedentes” para un país sin armas atómicas, pero no hay pruebas de que busque construir una bomba.
- Capacidad militar: Aunque carece de armas nucleares, Irán posee misiles balísticos, drones y fuerzas proxy en Líbano, Yemen e Irak, además de capacidad para cerrar el Estrecho de Ormuz.
El arsenal nuclear israelí: un “secreto a voces”
- 90 ojivas nucleares: Estimaciones del Instituto SIPRI sugieren que Israel, con ayuda de Francia en los años 50-60, desarrolló este arsenal.
- Opacidad total: Israel no ha firmado el Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP) ni permite inspecciones de la OIEA, pese a presiones de la ONU.
- Doble estándar: Mientras se sanciona a Irán, Israel opera sin rendir cuentas, alimentando tensiones regionales.
La bomba política
Los ataques recientes (como el contra Natanz y Fordow) se justifican bajo la premisa de “evitar que Irán obtenga armas nucleares”. Pero expertos como Kelsey Davenport (Asociación de Control de Armas) señalan que no hay evidencia concluyente de que Teherán busque la bomba.
En perspectiva: El conflicto refleja una carrera asimétrica: Israel, con arsenal confirmado pero no reconocido, ataca a Irán, cuyo programa —vigilado hasta 2018— ahora opera sin restricciones. La comunidad internacional enfrenta un dilema: ¿cómo exigir transparencia a Irán si tolera la opacidad de Israel?
