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Internacional

Donald Trump, caos, incertidumbre y confusión postelectoral

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, intenta convertir las elecciones libres y justas en el país en un enredo de desinformación, reclamaciones legales engañosas y ataques sin base a los pilares de la democracia del país.

El caos y la confusión resultantes no son un efecto secundario de la estrategia de Trump tras su derrota ante el demócrata Joe Biden. El caos y la confusión son la estrategia.

El frenesí de ataques del mandatario contra los comicios le permite sembrar dudas y desconcierto entre sus seguidores más leales, dejando la falsa impresión de que es víctima de un fraude electoral. Eso no le mantendrá en el cargo – Biden asumirá la presidencia el 20 de enero-, pero podría socavar los esfuerzos del próximo presidente para unir a un país dividido y dar impulso a la siguiente iniciativa de Trump, ya sea otra campaña para volver a la Casa Blanca en 2024 o un proyecto mediático de alto nivel.

Todo esto gira en torno a mantener su ego y su visibilidad”, dijo Judd Gregg, exgobernador republicano y senador de Nueva Hampshire. “Está recaudando mucho dinero y piensa utilizarlo”.

Los efectos de la estrategia de Trump ya son visibles. Un sondeo de la Universidad Monmouth publicado ayer mostraba que el 77% de los partidarios de Trump dijeron que la victoria de Biden se debía al fraude, pese a las abrumadoras pruebas de lo contrario.

Más de dos semanas después de las elecciones, la actitud de Trump es al mismo tiempo impactante y poco sorprendente. Supone un ataque sin precedentes contra unos comicios democráticos de un presidente en el cargo ante el silencio mayoritario del Partido Republicano, que ha evitado condenarlo. Pero también es un panorama que Trump había preparado durante gran parte de 2020, especialmente con sus acusaciones infundadas de que el voto por correo sería objeto de un fraude sistemático. Eso no era cierto antes de 2020 ni en estas elecciones.

Su respuesta no debería sorprender a nadie. La adelantó mucho antes de las elecciones y sigue su patrón de declarar su victoria, independientemente de los hechos”, dijo Tim Pawlenty, exgobernador republicano de Minnesota.

En este caso, no hay duda sobre los hechos.

Biden superó a Trump por un amplio margen en estados disputados clave, como Michigan y Pensilvania, logró más de los 270 votos electorales necesarios para ganar la Casa Blanca y batió un récord con casi 80 millones de votos en todo el país. Responsables electorales a nivel federal y estatal han declarado que los comicios estuvieron libres de fraude generalizado, y algunos incluso describieron la votación de 2020 como la más segura en la historia de Estados Unidos.

Trump respondió disparando al mensajero al destituir a Chris Krebs, máximo responsable de seguridad electoral en el país, y que ha defendido varias veces la integridad de los comicios.

Las declaraciones creíbles de Krebs y de responsables estatales en todo el país no han hecho nada por disuadir a Trump, que insiste sin pruebas en que fuerzas demócratas conspiraron para amañar las elecciones en su contra. Se niega a reconocer oficialmente la victoria de Biden, impidiendo que el presidente electo acceda a toda clase de información, desde seguridad nacional a los planes del gobierno para distribuir una vacuna contra el COVID-19, algo que ocurriría principalmente durante el mandato de Biden.

Mientras tanto, el presidente y sus aliados han intentado avanzar sus demandas en los tribunales. Y legisladores republicanos destacados como el líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnell, dijo que Trump debe tener espacio para utilizar todas las opciones legales disponibles. Sin embargo, esas opciones se están agotando con rapidez, conforme jueces de todo el país desestiman una demanda tras otra.

Algunos aliados de Trump reconocen en privado que su objetivo no es revocar la victoria de Biden en los tribunales. Y que no ven una forma factible de persuadir a las legislaturas estatales con mayoría republicana para que nombren electores que voten en contra de la voluntad de los votantes, aunque algunos asesores de Trump se sintieron respaldados esta semana cuando dos republicanos de Michigan votaron en contra de certificar la abrumadora victoria de Biden en el condado de Wayne. Tras una oleada de indignación pública, rectificaron su posición.

En lugar de cambiar el resultado de los comicios, los aliados de Trump dijeron que el objetivo es ayudar a mantener implicados y motivados a los seguidores más leales del mandatario con vistas a cualquier proyecto que emprenda tras dejar el cargo, aunque eso suponga mantener a la gente desinformada sobre la realidad de lo ocurrido en las elecciones.

Hace tiempo que Trump disfruta desdibujando las líneas entre la verdad y la ficción, y aprovechando la confusión que eso provoca. En todo caso, su presidencia sólo ha reforzado esas tendencias, dada la forma en la que el Partido Republicano y los medios afines han ayudado a avivar su versión de los hechos, incluso cuando es indiscutiblemente falsa.

Esa misma dinámica ha seguido reforzando a Trump después de los comicios. Varios medios conservadores pequeños se negaron a reconocer la victoria de Biden, lo que ha hecho crecer sus audiencias. Y la mayoría de los líderes republicanos ha ayudado a cubrir a Trump al evitar reconocer el triunfo de Biden, a pesar de que muchos lo hacen en privado.

Los legisladores republicanos tienen su propia estrategia en marcha. La mayoría del partido en el Senado depende de dos escaños por Georgia que se decidirán en enero en segunda vuelta, y algunos estrategas republicanos creen que mantener exasperada a la base de Trump es crucial para ganar allí. Han planteado las votaciones como una forma de vengar la derrota de Trump en una votación “amañada” y de frenar a Biden con una mayoría conservadora en la cámara.

Otros interpretan la respuesta del partido como simplemente un esfuerzo por pasar las últimas semanas del mandato de Trump sin agitar las aguas, aunque eso implique dejar que la desinformación sobre el proceso electoral se extienda por el país.

“Es política dura, cínica”, dijo Mike Murphy, un veterano estratega republicano que apoyó a Biden en las elecciones. “No creen que el ruido sea una amenaza inmediata, así que están esperando a que se vaya”.

En una dura condena a su partido, Murphy añadió: “El elefante ha dejado de ser el símbolo del Partido Republicano, y la gallina ha tomado su lugar”.

Con información de The Associated Press (AP)

Internacional

Netanyahu dice que ataques a Gaza casi terminan, pero que se desplazarían a Líbano

Según declaraciones del primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, la fase intensa de ataques contra Gaza ya casi termina, lo que permitiría a las tropas de Israel desplazarse a la frontera de Líbano, donde se encuentra el grupo paramilitar Hezbolá

La advertencia de que Israel se desplazaría en dirección a Líbano se da unos días después de que el líder de Hezbolá amenazara sobre una guerra “sin reglas ni límites”.

“Abrir aeropuertos y bases chipriotas al enemigo israelí para atacar Líbano significaría que el gobierno chipriota es parte de la guerra”, declaró el líder de Hezbolá contra Chipre, esto ante los rumores que indicaban la posibilidad de que Israel transitara por territorio chipriota.

Chipre forma parte de la Unión Europea, en donde se está sintiendo ya que la guerra se está extendiendo.

El intercambio de declaraciones del líder de Hezbollah y, ahora, del primer ministro de Israel ya ha sido tomado de la peor manera por estrategas políticos como el alto representante de relaciones exteriores de la Unión Europea, Josep Borrell. Sin analizarlo mucho, el funcionario dijo que: “el riesgo de que esta guerra afecte al sur de Líbano y se extienda es cada día mayor (…) Estamos en vísperas de que la guerra se expanda”.

A su vez, algunos medios tomaron la declaración hecha por Netanyahu como un posible acuerdo para terminar con la guerra, pero según el primer ministro israelí es que se podría llegar a un acuerdo parcial, pero solo para la entrega de rehenes, pues hasta ahora no tiene la intención de terminar con la guerra hasta que liquide a Hamás.

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Internacional

Biden y Trump tendrán su primer debate esta semana en Atlanta

El expresidente de Estados Unidos y precandidato republicano Donald Trump tendrá la última palabra en el debate electoral de esta semana en Atlanta (Georgia), con el actual presidente, el demócrata Joe Biden, anunció la cadena CNN, organizadora del evento.

Tras el lanzamiento de una moneda al aire, la campaña de Biden ganó el derecho de elegir la posición del podio en el debate o el orden de las declaraciones finales, y optó por la primera opción.

Los demócratas pidieron que su candidato debata desde el lado derecho de la pantalla de televisión, mientras que el podio de su rival republicano estará en el lado izquierdo.

Luego, la campaña de Trump solicitó que el expresidente pronuncie la declaración final del debate, lo que significa que Biden será el primero en terminar su intervención.

El debate, que será emitido el 27 de junio por la CNN, será el primero de los dos cara a cara televisados que habrá entre Biden y Trump antes de las elecciones del 5 de noviembre.

El debate se celebrará en Atlanta, durará 90 minutos y estará moderado por los periodistas de la CNN Jake Tapper y Dana Bash.

Habrá dos pausas comerciales durante las cuales el personal de campaña no podrá interactuar con su candidato.

Los equipos de Biden y Trump han aceptado también que los micrófonos estén cerrados durante todo el cara a cara excepto para el candidato al que le corresponda hablar.

Tampoco se les permitirá en el escenario a los contendientes accesorios ni notas escritas previamente, si bien recibirán un bolígrafo, una libreta y una botella de agua.

Biden pasará los próximos días en la residencia presidencial de Camp David (Maryland), a las afueras de Washington, para practicar y estar listo.

Por su parte, Trump lleva unas semanas preparándose en reuniones con algunos senadores y otros políticos que suenan como vicepresidenciables del republicano.

Será la primera vez que se enfrentan un presidente en activo y un expresidente en un debate electoral.

Tampoco es habitual que el debate se celebre en junio, antes de las convenciones nacionales de ambos partidos que oficializan las candidaturas, pero las primarias de este año estuvieron resueltas en primavera.

La cadena ABC organizará el segundo y último debate presidencial en septiembre. Los debates presidenciales televisados han sido parte de la tradición de Estados Unidos en todos los ciclos electorales desde 1976.

Con información de EFE

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Internacional

Princesa Ana del Reino Unido sufre conmoción, ¿cuál es su estado de salud?

La princesa Ana sufrió lesiones menores y una conmoción cerebral tras un incidente en la finca real de Gatcombe Park durante la noche del domingo 23 de junio, informó el Palacio de Buckingham.

La hermana del rey Carlos III, de 73 años, fue hospitalizada como medida de precaución para quedar bajo observación y se espera que se recupere por completo, añadió el Palacio en un reporte este lunes.

Aunque no se había confirmado la naturaleza exacta de las lesiones, había caballos en la zona. Su equipo médico dijo que sus lesiones en la cabeza encajaban con un posible impacto con la cabeza o las piernas de un caballo.

“El rey se ha mantenido estrechamente informado y se suma a toda la familia real para enviar su más cariñoso afecto y buenos deseos a la princesa para una pronta recuperación”, indicó el palacio en un comunicado este 24 de junio, sin dar más detalles.

¿Qué sabemos del accidente de la princesa Ana?

La princesa estaba caminando por el perímetro protegido de la finca cuando se produjo el incidente, según la AP británica.

El servicio de emergencias respondió a un aviso en el lugar y la princesa Ana fue atendida allí antes de ser trasladada al hospital Southmead en Bristol. Su esposo, el vicealmirante Tim Laurence, la acompañó.

En ese momento, estaban en la mansión en el condado de Gloucestershire los hijos de Ana con Mark Phillips, Zara Tindall y Peter Phillips.

El resto de la familia, incluidos sus hermanos Carlos, Andrés y Eduardo y los príncipes de Gales, Guillermo y Catalina, fueron notificados poco después.

La princesa Ana es uno de los miembros más ocupados de la familia real, que asumió más tareas tras el diagnóstico de cáncer del rey Carlos III. Sus compromisos en los próximos días serán aplazados y la princesa no asistirá a la cena de estado organizada en honor del emperador de Japón.

Un portavoz del Palacio de Buckingham dijo a The Guardian que la princesa Ana “se encuentra en un estado cómodo y permanece en el hospital como medida de precaución para una mayor observación. Su Alteza Real está recibiendo la atención experta adecuada. No se compartirán más detalles en este momento”.

De acuerdo con el diario británico, la princesa Ana se quedará en el hospital de Southmead “a menos que su equipo médico indique lo contrario”.

Con información de AP y EFE

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