Conecta con nosotros

Interesante

Veinticuatro años después del 11-S, el juicio de Guantánamo sigue en limbo tras confesiones revocadas y polémica por torturas

Publicado

A más de dos décadas de los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001 —que dejaron 2,976 víctimas mortales—, el proceso judicial contra Khalid Shaikh Mohammed y otros cuatro acusados considerados los cerebros del ataque sigue estancado en medio de disputas legales, acusaciones de tortura y la reciente revocación de un acuerdo que les habría permitido eludir la pena de muerte.

Mohammed, Walid bin Attash y Mustafa al-Hawsawi —detenidos desde 2003 en la prisión militar de Guantánamo— aceptaron declararse culpables en agosto de 2023 a cambio de cadena perpetua, evitando así una posible condena a muerte. Sin embargo, el secretario de Defensa de EE.UU., Lloyd Austin, revocó el acuerdo semanas después tras fuertes críticas públicas y políticas, dejando el proceso nuevamente en punto muerto.

El juicio, que lleva más de una década en preparación, se ha visto entrampado recurrentemente por un debate central: si las confesiones obtenidas bajo tortura en prisiones secretas de la CIA —donde Mohammed permaneció tres años antes de ser trasladado a Guantánamo— pueden ser admitidas como prueba.

Según documentos judiciales y reportes de The New York Times, la fiscalía militar comunicó a las familias de las víctimas que la aceptación de culpabilidad habría evitado un juicio prolongado —estimado entre 12 y 18 meses— y el riesgo de que un juez desestimara las confesiones claves para el caso.

Khalid Shaikh Mohammed, ingeniero de formación y lugarteniente de confianza de Osama bin Laden, no solo es acusado de planear los ataques del 11-S, sino también de decapitar con sus propias manos al periodista estadounidense Daniel Pearl en 2002, además de participar en el atentado al World Trade Center de 1993.

Sus coacusados, Walid bin Attash y Mustafa al-Hawsawi, habrían desempeñado roles logísticos clave: entrenamiento de secuestradores y financiamiento de los ataques, respectivamente.

Agrega un comentario

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *