Operación Lanza del Sur: Estados Unidos intensifica ataques contra presuntas lanchas narco en el Pacífico

El Comando Sur de los Estados Unidos informó este jueves la destrucción de dos nuevas embarcaciones en el Pacífico oriental, en operativos que resultaron en la muerte de cinco personas presuntamente vinculadas al narcotráfico. Con estos episodios, suman ya 25 intervenciones militares en aguas del Caribe y el Pacífico desde septiembre, bajo la denominada “Operación Lanza del Sur”, con un saldo de al menos 103 fallecidos.

Según el comunicado oficial, la inteligencia estadounidense confirmó que los buques interceptados transitaban por rutas conocidas del narcotráfico y participaban en operaciones de tráfico de drogas. Las embarcaciones fueron atacadas de manera cinética —es decir, con uso de fuerza letal—. En la primera lancha viajaban tres ocupantes, y en la segunda, dos. No hubo supervivientes.

Este anuncio se produce menos de 24 horas después de que el mismo Comando reportara la destrucción de otra embarcación con cuatro tripulantes en la misma región. La estrategia, que según fuentes oficiales busca interrumpir el flujo de drogas hacia territorio norteamericano, ha sido objeto de debate por su letalidad y marco legal.

Marco legal y justificación

El Pentágono ha defendido la legalidad de estas operaciones. El pasado 2 de diciembre, el secretario de prensa de la institución, Kingsley Wilson, afirmó que las acciones —incluidas las realizadas en aguas cercanas a Venezuela— se ajustan a la legislación estadounidense y al derecho internacional.

“Estas acciones también han sido aprobadas por los mejores abogados militares y civiles de toda la cadena de mando”, aseguró Wilson.

No obstante, la operación ha levantado cuestionamientos desde su inicio en septiembre, cuando se reveló que en el primer ataque se ordenó una “doble agresión” para no dejar sobrevivientes. La Casa Blanca atribuyó esa decisión específica al almirante Frank Bradley, entonces líder del Comando de Operaciones Especiales, exonerando de responsabilidad al secretario de Guerra, Pete Hegseth.

Patrón de intervención y consecuencias

La “Operación Lanza del Sur” marca un incremento significativo en el uso de fuerza militar directa contra el narcotráfico marítimo. Los blancos son seleccionados mediante inteligencia que, según el Comando Sur, identifica embarcaciones que transportan narcóticos. Sin embargo, la falta de transparencia sobre los procedimientos de identificación y la ausencia de juicio previo han generado críticas entre organizaciones de derechos humanos.

El lenguaje empleado por las autoridades estadounidenses ha sido contundente: en el último comunicado, los fallecidos fueron calificados como “narcoterroristas”, un término que refuerza la justificación de las acciones bajo parámetros de seguridad nacional.

Hasta ahora, las intervenciones se han centrado en aguas internacionales del Pacífico Oriental y el Caribe, regiones consideradas corredores clave para el tráfico de drogas hacia Norteamérica. La escalada sugiere que la estrategia continuará en el corto y mediano plazo, priorizando la interrupción del flujo sobre el apresamiento y judicialización de sospechosos.