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Sheinbaum anuncia el inicio de una nueva era en el Poder Judicial: “Se acabó la corrupción, el privilegio y el nepotismo”

La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo declaró este miércoles que el próximo 31 de agosto concluirá una era en el Poder Judicial de la Federación caracterizada por la “corrupción, el privilegio y el nepotismo”, y anunció el inicio de una nueva etapa para la justicia en México.
Durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, la mandataria subrayó que la reforma judicial en curso es “muy profunda” y confió en que los nuevos integrantes de la Corte, así como los jueces y magistrados recién electos, demostrarán a partir del 1 de septiembre un cambio estructural en el poder judicial. “Se deben al pueblo”, afirmó.
Estas declaraciones se producen luego de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) validara —en una decisión dividida— los resultados de la primera elección de ministros, jueces y magistrados en la historia del país, llevada a cabo el primer domingo de junio.
El fallo no fue unánime. Durante la sesión, los magistrados Reyes Rodríguez Mondragón y Janine Otálora Malassis presentaron proyectos de sentencia que proponían anular la elección judicial debido a la presunta distribución masiva de “acordeones” o guías de votación, que —argumentaron— vulneraron la equidad de la contienda.
Rodríguez Mondragón sostuvo que existían pruebas contundentes, incluidos más de tres mil ejemplares físicos de estos materiales y decenas de notas periodísticas, que demostraban una “estrategia ilícita, coordinada, sistemática y generalizada” para influir en el voto. Según su informe, la propaganda ilícita fue financiada por terceros ajenos al proceso y se distribuyó en las 32 entidades del país.
No obstante, la mayoría de los magistrados electorales —Mónica Soto, Felipe de la Mata y Felipe Fuentes— consideraron que las pruebas presentadas eran “insuficientes y meramente indiciarias”, avalando así la legalidad del proceso.
Sheinbaum celebró el inicio de lo que calificó como una “transformación histórica” del sistema judicial mexicano, y confió en que los nuevos funcionarios judiciales responderán a las expectativas de transparencia y rendición de cuentas demandadas por la ciudadanía.
