Aficionados del Club León armaron una revuelta en las instalaciones del estadio Nou Camp, después de que se diera a conocer la información de que el recinto deportivo sería entregado al empresario Roberto Zermeño, aun cuando este se había comprometido a respetar un contrato que permitía al equipo permanecer en el inmueble hasta mayo de 2022.

La mañana de este 9 de octubre, los seguidores del club esmeralda se aglutinaron en las puertas del estadio para no permitir que pasara a manos de Zermeño, quien es antiguo dueño del equipo. Fue así que de manera violenta entraron a las instalaciones gritando insultos hacia esta persona.

La actividad en el estadio de León comenzó en la madrugada, pues a esas horas arribaron camiones del Grupo Pachuca, actual dueño de la institución deportiva, arribaron para sacar trofeos, muebles, artículos de oficina, así como desalojar la tienda de ropa oficial que está al interior.

Posteriormente, cerca de las 7:00 horas, los apoderados legales de Club Deportivo y Social León, A.C., encabezados por Zermeño, acudieron al lugar para tomar posesión del estadio, en donde también se encontraban abogados del Grupo Pachuca para discutir la situación; no obstante, esta se salió de control en cuanto llegaron los aficionados para manifestarse en contra del desalojo.

De acuerdo con reportes de la prensa local, la toma del estadio de León no se pudo llevar a cabo este viernes, debido a que no existieron las medidas de seguridad necesarias para realizarla.

Cabe recordar que el 31 de octubre del año pasado, un juez le dio la posesión del estadio a la razón social Club Deportivo y Social león, A.C., liderada por Roberto Zermeño, su hijo y un socio de Celaya, por lo que el equipo debía entregar las instalaciones, mismas que comprenden un área de 60,027 metros cuadrados.

Este asunto por la disputa de la casa del León fue promovido por Héctor González, vicepresidente del Consejo Directivo de la asociación anteriormente mencionada, y respecto a la resolución de la Suprema Corte, Felipe de Jesús López Gómez, secretario del Ayuntamiento de León, dijo que era “definitivamente ejecutoria, vamos a proceder con el cumplimiento de la misma”.

Desde entonces, la directiva de León aceptó que haría entrega de las instalaciones, pero que el equipo continuaría jugando en esa cancha hasta que terminara el contrato que tiene para usarla. Por medio de un comunicado de aquellas fechas, puntualizaron lo siguiente:

“Hay que enfatizar que el Club León no tiene riesgo en cuanto a su permanencia al señalar que va a continuar jugando en este estado, dado que cuenta con un contrato de arrendamiento que se formuló desde el 2012 y hasta el 2022”

Por su parte, el presidente municipal, Héctor López Santillana, durante una conferencia de prensa señaló que había hablado con los directivos de Grupo Pachuca y estos le dijeron que el club se mantendría en ese estadio sin afectar a ninguno de los contratos vigentes.

“Hemos hablado con los señores Martínez, quienes han estado puntualmente informados sobre todo, mantuvimos una última comunicación donde ellos manifestaron mantener al equipo con este contrato que les permite usar la cancha del Estadio León”, detalló el funcionario.

Tras los hechos sucedidos este 9 de octubre, el presidente del equipo, Jesús Martínez, emitió un mensaje por medio de sus redes sociales, en donde destacó la unión entre el club y la gente que los apoya.

“Nuestra gente y nuestra afición son las que han dado vida al Club León. Este equipo es del pueblo, y el estadio es su casa. En el Club León, somos de nuestra gente. La llevamos en el alma”, escribió el dueño de la institución.

Con información de Infobae