Internacional
Guyana distribuye su riqueza petrolera y dará 500 dólares a cada habitante
El presidente de Guyana, Mohamed Irfaan Ali, anunció una medida inédita para compartir la creciente riqueza petrolera del país, mediante un pago único de 100,000 dólares guyaneses (aproximadamente 500 dólares estadounidenses) a cada habitante mayor de edad, tanto en el país como en el extranjero. La medida fue anunciada en octubre, pero ha comenzado a captar la atención mundial en las últimas semanas.
Ante la Asamblea Nacional de Guyana, Irfaan Ali explicó que esta ayuda busca aliviar la presión económica que enfrentan los ciudadanos debido al aumento en los precios de bienes y servicios. “Este es un impulso para la prosperidad y la distribución justa de la riqueza”, comentó el presidente, quien subrayó que esta acción busca expandir los beneficios económicos hacia toda la comunidad guyanesa.
Para recibir el pago, los ciudadanos solo deben presentar una identificación oficial. Originalmente, el gobierno propuso duplicar el monto, pero ajustó la cifra para que el beneficio alcanzara a todos los ciudadanos.
Guyana, con una población de aproximadamente 800,000 personas (de las cuales casi 400,000 viven en el extranjero), se ha transformado en una de las economías de más rápido crecimiento en el mundo, gracias a la explotación de sus yacimientos petroleros. Desde el inicio de la producción en 2019, el PIB del país ha crecido de forma exponencial. Un informe del Fondo Monetario Internacional destacó que en 2022 Guyana alcanzó un crecimiento del PIB real del 62.3%, respaldado en gran medida por el aumento de la producción petrolera.
Sin embargo, la expansión acelerada de la industria petrolera ha provocado cuestionamientos de grupos ambientalistas. En respuesta, el presidente Ali ha argumentado que su país ha preservado áreas de flora equivalentes en tamaño a la extensión de Reino Unido, subrayando su compromiso con la sostenibilidad mientras trabaja para mejorar el bienestar de su población.
Este pago único se presenta como un esfuerzo por compartir directamente los frutos de esta bonanza petrolera, en un país que, hasta hace pocos años, contaba con uno de los PIB per cápita más bajos de América Latina y el Caribe.