Rebrote de COVID-19 se extiende a cinco regiones de China

Autoridades del país asiático informaron de 68 nuevos contagios en 24 horas, ocasionando que millones de habitantes sean sometidos a pruebas.

A pesar de que la situación en China se encuentra controlada, con solo 291 enfermos en todo el país, se presentó un foco de infección en las regiones del noreste, donde se ha propagado el virus en cinco provincias, entre ellas la capital Beijing, según dieron a conocer autoridades sanitarias este martes.

China, el país donde apareció el virus, logró contener la pandemia con el uso obligatorio de la mascarilla, confinamiento y control de contactos, no registrando ningún muerto desde el pasado mes de mayo.

Pero a pesar de todas las medidas, han aparecido pequeños focos de infección en distintos puntos del país, anunciando así 68 nuevos contagios en 24 horas, el mayor número registrado desde el pasado mes de abril.

De estos nuevos casos, 57 contagios fueron registrados en la región de Xinjian (noroeste), en cuya capital Urumqi se detectó un gran número de aumento de casos, causando que millones de habitantes sea sometidos a test de detección del virus.

Otros seis nuevos casos fueron registrados en la ciudad de Dalian, en la región de Liaoning, al noreste del país, cuyo foco principal fue detectado en una planta de tratamiento de mariscos.

Con los nuevos casos anunciados el martes hay ahora un total de 44 pacientes.

Este foco ha contribuido a difundir el virus en cinco provincias, incluida la de Fujian, situada a más e 1.200 kilómetros, indicaron el martes las autoridades sanitarias.

El aumento de casos en Dalian también tuvo repercusiones en Beijing. Un nuevo enfermo de Covid-19, relacionado con un enfermo asintomático que llegó desde la ciudad portuaria, fue anunciado el martes, tratándose del primer caso local registrado en la capital del país desde que se había logrado controlar el foco a principios de julio.

Ante el peligro, las autoridades de Dalian anunciaron el domingo una campaña de test masivos a los habitantes y el lunes indicaron que se habían hecho 1,68 millones.

En todo el país, el uso de mascarillas y los controles de temperatura siguen siendo obligatorios. La mayoría de los extranjeros no pueden ingresar al país y los ciudadanos chinos tienen que pasar una cuarentena de dos semanas antes de regresar a sus casas.