Internacional
Autoridades de Corea del Sur piden detener a presidente destituido por decretar ley marcial

La policía surcoreana ha solicitado formalmente una orden de detención contra el expresidente Yoon Suk-yeol, quien fue destituido recientemente de su cargo. La decisión final sobre si se emitirá la orden recae ahora en el Tribunal Constitucional del país.
Este desarrollo se produce en medio de investigaciones relacionadas con presuntas irregularidades cometidas durante su mandato. Sin embargo, los detalles específicos de los cargos aún no han sido revelados públicamente.
Yoon Suk-yeol, quien asumió la presidencia en 2022, ha sido una figura polémica en la política surcoreana, y su destitución ha generado un intenso debate en el país. El Tribunal Constitucional deberá ahora determinar si las pruebas presentadas son suficientes para proceder con la detención del exmandatario.
La policía surcoreana ha solicitado una orden de arresto contra el expresidente Yoon Suk-yeol, quien fue destituido recientemente tras controversias relacionadas con su gestión. Según medios internacionales, la orden estaría motivada por su decreto de ley marcial, que incluía un intento fallido de que el Ejército tomara el control del Parlamento, lo que oficiales consideran un grave abuso de autoridad.
Las investigaciones, lideradas por la Oficina de Investigación de la Corrupción para Funcionarios de Alto Rango, también señalan que Yoon habría incurrido en un intento de rebelión, lo que agrava su situación legal. Este acto habría buscado consolidar su poder tras enfrentar tensiones políticas, pero resultó en su destitución y una crisis política en el país.
El caso ahora está en manos del Tribunal Constitucional, que determinará si se emite la orden de arresto contra el exmandatario. Mientras tanto, este episodio marca un capítulo crítico en la política de Corea del Sur, con implicaciones significativas para la estabilidad del gobierno y el estado de derecho en el país.
De acuerdo con Euro News, Yoon Suk-yeol, expresidente de Corea del Sur, ha iniciado movimientos legales para evitar que la orden de detención solicitada en su contra sea aprobada por el Tribunal Constitucional. El exmandatario enfrenta acusaciones de abuso de poder e intento de rebelión tras decretar ley marcial e intentar que el Ejército tomara el control del Parlamento, lo que llevó a su destitución.
El abogado de Yoon argumentó que “un presidente en funciones no puede ser procesado por abuso de poder”. Sin embargo, admitió que el estatus actual de su cliente, como presidente destituido, podría permitir que procedan las acusaciones en su contra.
Mientras el Tribunal Constitucional evalúa la solicitud de arresto, el caso genera un intenso debate en Corea del Sur, destacando la fragilidad institucional y los desafíos legales que enfrentan los líderes políticos en situaciones de crisis.
En un giro inesperado de los acontecimientos, el expresidente surcoreano Yoon Suk-yeol decretó ley marcial, argumentando que era necesaria para salvaguardar la gobernabilidad del país ante lo que él calificó como una oposición “comunista” y simpatizante de Corea del Norte. Sin embargo, la medida fue rechazada casi de inmediato por el Parlamento surcoreano, dominado por la oposición, que no solo anuló la ley marcial, sino que también procedió a la destitución de Yoon Suk-yeol.
La destitución del mandatario dio paso a la designación de Han Duck-soo como nuevo presidente interino. Sin embargo, su mandato fue breve, ya que el 27 de diciembre, Han fue depuesto por el Parlamento debido a su apoyo a la controvertida ley marcial. En su lugar, asumió el cargo el secretario de Economía, quien tendrá la tarea de estabilizar una situación política tensa y cada vez más inestable.
