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Mujer en Malasia enfrenta cargos por falsificar certificado de matrimonio con el heredero real

Persana Avril Sollunda, una mujer de 43 años, fue acusada formalmente ante un tribunal de sesiones de Malasia por falsificar y publicar un certificado de matrimonio que la acreditaba como esposa del sultán Ismail Idris, heredero del estado de Johor e hijo del rey Ibrahim Iskandar, en un insólito caso de suplantación real que ha conmocionado al país asiático.
Los hechos se remontan al 25 de febrero de 2025, cuando Sollunda subió a su cuenta de TikTok @king.charles.ratu un video donde presentaba un documento apócrifo que supuestamente certificaba su matrimonio con el príncipe heredero, lo que –según afirmaba– la convertía en la “princesa heredera Ratu Shana”.
La justicia interviene
La publicación rápidamente se viralizó y atrajo la atención de las autoridades, quienes verificaron la inexistencia de dicho enlace matrimonial. En junio de 2025, la mujer fue imputada por violar la Ley de Comunicaciones y Multimedia de 1998, que penaliza la difusión de información y documentos falsos.
Sollunda se declaró inocente durante su audiencia inicial. El juez ordenó que se le realice una evaluación psiquiátrica para determinar su estado mental al momento de los hechos, un procedimiento común en casos de esta naturaleza dentro del sistema judicial malasio.
Juicio y posibles consecuencias
El juicio en su contra está programado para los días 3 y 5 de diciembre de 2025, donde la acusada deberá presentar sus argumentos y pruebas para demostrar su inocencia. De ser declarada culpable, Sollunda enfrenta una multa de hasta 500,000 ringgits (aproximadamente 120,000 dólares estadounidenses) o una pena de hasta dos años de prisión.
El caso ha generado un amplio debate en Malasia sobre los límites de la libertad de expresión en redes sociales y el respeto a la institución monárquica, que ocupa un lugar central en la identidad nacional y el sistema político del país. Las leyes malasias son particularmente estrictas en lo que respecta a la difamación de miembros de la realeza, considerada una ofensa grave.