Continúa el INE sin recursos para organizar consulta popular sobre juicio a ex presidentes

Nuevo golpe desde Palacio Nacional al corazón del INE. Esta vez llega desde las oficinas del secretario de Hacienda, Arturo Herrera, quien dio un rotundo no a los consejeros electorales, quienes habían mandado un SOS, porque no hay un centavo para organizar la consulta popular del próximo 1 de agosto.

Sí, esa consulta que propuso el presidente Lopez Obrador para enjuiciar o no a los expresidentes de México por actos de corrupción. La pregunta que se hará acabó siendo redactada en la Suprema Corte de Justicia de la Nación, pasando así el filtro constitucional necesario para que se inscriba en la historia como el primer ejercicio de este tipo en nuestro país.

Se realizará el domingo 1 de agosto y es mandato de la Carta Magna que lo organice el INE… nada más que eso cuesta dinero, porque hay que capacitar funcionarios que atiendan las mesas receptoras, es necesario instalar esas mesas como si fueran casillas, la impresión de boletas, el uso de crayones y demás material también tienen un costo económico.

EN LUGAR DE AUMENTO, RECORTE

Los consejeros electorales habían solicitado una ampliación presupuestal desde el año pasado a la Cámara de Diputados con el objetivo de sufragar los gastos que habrá. Según sus cálculos, se requerían mil 499 millones 392 mil  669 pesos adicionales a lo que de por sí se presupuestó para la organización de la jornada electoral del 6 de junio, la más grande de la historia de Mexico. Ya desde entonces, los diputados cerraron la puerta al planteamiento del Instituto y le aplicaron, además, un recorte de 870 millones de pesos. 

Los consejeros electorales recibieron la noticia con preocupación y, al inicio de este año, hicieron contacto con el secretario de Hacienda, a fin de que les ayudara a resolver el problema. Desde el pasado mes de marzo esperaban una respuesta, porque ese fue el compromiso.

Pasaron las semanas y nada que llegaba alguna señal. Fue así que, de plano, en una sesión del Consejo General, el INE se declaró en déficit presupuestal y dejó ver la delicada situación ante la responsabilidad de organizar, menos de dos meses después de los comicios, otro ejercicio de convocatoria nacional para preguntar:

“¿Estás de acuerdo o no en que se lleven a cabo las acciones pertinentes, con apego al marco constitucional y legal, para emprender un proceso de esclarecimiento de las decisiones políticas tomadas en los años pasados por los actores políticos, encaminado a garantizar la justicia y los derechos de las posibles víctimas?”.

EL ÁRBITRO SE “RASCARÁ CON SUS PROPIAS UÑAS”

Bueno, pues ya es un hecho que no habrá ni un peso más para el INE, según la respuesta de Hacienda. En los círculos electorales se comenta que, con sus recientes decisiones, al expedir nuevas reglas que eviten la sobrerrepresentación de Morena en el Congreso y, obviamente, con su reiterada orden de cancelar los registros a decenas de candidatos morenistas, entre ellos Félix Salgado (Guerrero) y Raúl Morón (Michoacán), dinamitaron cualquier posibilidad de recibir apoyo presupuestal extra.

Siendo así, el árbitro deberá “rascarse con sus propias uñas”, lo que ya esperaban en las

oficinas de Viaducto Tlalpan, donde últimamente son comunes las manifestaciones de inconformidad de simpatizantes y candidatos de Morena, respaldados con la presencia de Mario Delgado. 

El dirigente nacional de ese partido no pierde ocasión de echar en cara al árbitro una supuesta intención de maltratar o afectarlos en la contienda por más de 21 mil cargos de elección popular que están en disputa este año. Por su parte, Salgado Macedonio se ha dado el lujo de amenazar, particularmente al consejero Lorenzo Córdova, exhibiendo féretros para él y advirtiendo, en tono sarcástico, con apersonarse en su domicilio particular para confrontarlo. 

Hay molestia entre los consejeros, no sólo por el tono de las protestas, las descalificaciones desde Palacio Nacional, las presiones desde las Cámaras de Senadores y Diputados, la dirigencia de Morena y sus simpatizantes.

Esta negativa a conceder recursos para hacer un trabajo ejemplar, en lo que será la primera consulta ciudadana constitucional, es la gota que derrama el vaso, porque el prestigio internacional del INE difícilmente se conservará si no hay apoyo financiero para una democracia que nació y creció desde la desconfianza histórica y que en términos económicos es costosa. 

La idea original era instalar 104 mil mesas receptoras para la consulta popular, habrá que ver para cuántas les alcanza y qué mecanismos hacen que el ejercicio sea lo menos costoso posible.

SI NO HAY PARA MEDICINAS…

El consejero Ciro Murayama hacía un simil: “Es como si te ordeno que debe haber educación para todos y a veces no se le da dinero para construir  escuelas, para pagar maestros. Es lo que nos están pidiendo” 

En corto, funcionarios de primer nivel en el INE ya lo veían venir y se les escuchaban expresiones como: “Si no hay dinero para medicinas, ni siquiera tratamientos para niños que padecen cáncer, menos lo habrá para el INE”. Y tenían razón. 

Ahora toca a los consejeros y consejeras sacar la casta, tomar las mejores decisiones que garanticen una consulta popular apegada a la legalidad y a los estándares de calidad organizativa del INE. Tienen algo a su favor: el capital humano del Instituto, que nunca ha bajado los brazos, por más difíciles que sean los tiempos de la 4T.

Con información de EME EQUIS