Internacional
Líder de Irán exige pena de muerte para Benjamin Netanyahu

El líder supremo de Irán, Alí Jameneí, calificó de insuficiente la orden de aprehensión emitida por la Corte Penal Internacional (CPI) contra el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, y pidió que se le condene a la pena de muerte por crímenes de guerra.
“Debe emitirse una sentencia de muerte para Netanyahu y los líderes criminales de este régimen (Israel)”, declaró Jameneí, quien responsabilizó a Israel de graves violaciones de derechos humanos, especialmente en el conflicto reciente en Gaza.
Contexto de la orden de aprehensión
Hace unos días, la CPI emitió órdenes de arresto contra Netanyahu y el exministro de Defensa Yoav Gallant, acusándolos de utilizar tácticas de guerra inhumanas, como la hambruna y la restricción de asistencia humanitaria a Gaza tras el ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023.
Además, la CPI también giró una orden de aprehensión contra Mohammed Deif, un alto líder de Hamás, aunque existen informes no confirmados de que podría haber muerto en los bombardeos israelíes.
Críticas desde Teherán
El líder iraní criticó las tácticas israelíes en Gaza y Líbano, afirmando que los ataques a civiles no representan una victoria militar. “El bombardeo de casas de civiles no es una victoria. El enemigo no ha ganado en Gaza ni en Líbano, ni ganará”, sostuvo Jameneí, según declaraciones recogidas por EFE.
Irán, un histórico opositor al Estado de Israel, ha intensificado su retórica contra Netanyahu en medio del prolongado conflicto con Hamás, en el que miles de civiles han sido afectados por los ataques y bloqueos.
Dificultades para la detención
Aunque la CPI ha emitido la orden, la posibilidad de arrestar a Netanyahu enfrenta serios obstáculos. Israel no es miembro de la Corte Penal Internacional, lo que significa que cualquier acción legal contra el primer ministro dependería de su captura en territorio extranjero, un escenario que, hasta ahora, parece poco probable.
Mientras tanto, el conflicto en Gaza sigue escalando, con la comunidad internacional dividida en torno a las responsabilidades de las partes involucradas y la viabilidad de una solución pacífica.