Trump planea resucitar Alcatraz como centro de detención migrante en polémico proyecto multimillonario

La administración del presidente Donald Trump está considerando transformar la mítica prisión de Alcatraz en un centro de detención para migrantes, según han revelado fuentes gubernamentales. El ambicioso proyecto, que se encuentra en fase preliminar, requeriría una inversión estimada en 2,000 millones de dólares para demoler y reconstruir completamente las instalaciones del icónico complejo carcelario ubicado en la bahía de San Francisco.

Tom Homan, coordinador de políticas fronterizas de la administración Trump, confirmó que se están evaluando los aspectos técnicos y financieros del proyecto. “Necesitamos determinar la capacidad real, los tipos de régimen de detención y los costos operativos antes de tomar cualquier decisión”, explicó el funcionario, quien admitió que el plan aún enfrenta importantes interrogantes logísticas.

El posible renacimiento de Alcatraz como centro de detención se enmarca en el endurecimiento de las políticas migratorias que ha caracterizado el segundo mandato de Trump. Apenas este mes, el mandatario anunció la apertura de un nuevo centro de detención en Florida apodado “Alligator Alcatraz”, y ha promovido la expansión de deportaciones exprés y la construcción de nuevos muros fronterizos.

Sin embargo, expertos en políticas penitenciarias han expresado serias dudas sobre la viabilidad del proyecto. Alcatraz, que funcionó como prisión federal entre 1934 y 1963, era notoriamente costosa de operar – hasta tres veces más cara que otras instalaciones correccionales del país. Este alto costo operativo fue precisamente una de las razones principales por las que el complejo fue cerrado hace más de seis décadas.

Además de los desafíos financieros, el plan enfrenta obstáculos políticos y logísticos. California, estado gobernado por demócratas, ha sido consistentemente crítico de las políticas migratorias de Trump. Transportar suministros y personal a una isla incrementaría significativamente los costos operativos en comparación con instalaciones continentales.

La administración estaría considerando dos opciones para hacer viable el proyecto: construir una instalación más pequeña que la prisión original o establecer una asociación público-privada con contratistas del sector penitenciario. Fuentes cercanas al proceso han señalado que el presidente podría considerar excesivo el presupuesto inicial de 2,000 millones de dólares.

Mientras los equipos técnicos realizan los estudios de factibilidad – proceso que podría tomar entre tres y seis meses – la Casa Blanca mantiene conversaciones preliminares con posibles contratistas privados interesados en el proyecto. La decisión final sobre el futuro de Alcatraz como centro de detención migrante podría anunciarse a principios de 2026.