Internacional
Irán evalúa cerrar el estrecho de Ormuz tras aprobación parlamentaria: ¿Qué implicaría para el mercado global?

El Parlamento iraní aprobó este domingo una propuesta para cerrar el estratégico estrecho de Ormuz, una ruta crítica por la que circula alrededor del 20% del suministro global de petróleo y gas. Sin embargo, la medida aún debe ser ratificada por el Consejo Supremo de Seguridad Nacional, según informó la cadena estatal Press TV.
La iniciativa llega en medio de crecientes tensiones entre Irán e Israel, luego de los recientes ataques a instalaciones nucleares iraníes atribuidos a fuerzas israelíes con apoyo de Estados Unidos. Aunque el cierre no es inminente, el legislador y comandante de la Guardia Revolucionaria, Esmail Kosari, afirmó que la opción está “en la agenda y se ejecutará cuando sea necesario”.
¿Por qué es clave el estrecho de Ormuz?
El estrecho, de 320 kilómetros de ancho, conecta el golfo Pérsico con el golfo de Omán y es vital para el comercio energético mundial. Gran parte de sus aguas son internacionales, pero su zona más estrecha está bajo jurisdicción de Irán y Omán. Cualquier interrupción en el tránsito marítimo podría desencadenar una crisis en los mercados globales, elevando los precios del crudo en un momento de ya alta volatilidad.
Desde la semana pasada, agencias navales han advertido a buques mercantes que eviten acercarse a aguas iraníes debido al riesgo de un escalamiento militar. “Recomendamos precaución en la zona ante posibles represalias”, señaló un informe de seguridad marítima.
Antecedentes de amenazas y consecuencias económicas
No es la primera vez que Irán amenaza con bloquear Ormuz. En el pasado, el régimen ha utilizado esta posibilidad como presión frente a sanciones occidentales. Sin embargo, un cierre real afectaría no solo a sus rivales, sino también a aliados comerciales como China, principal comprador de petróleo iraní.
Expertos en geopolítica energética advierten que, de materializarse la medida, los precios del petróleo podrían dispararse, impactando economías aún recuperándose de la inflación postpandemia. “Sería un golpe severo al mercado, con repercusiones globales”, afirmó un analista de S&P Global.
¿Qué sigue?
La decisión final recae ahora en el Consejo Supremo de Seguridad Nacional, liderado por figuras cercanas al ayatolá Ali Khamenei. Mientras tanto, la Guardia Revolucionaria —que controla el acceso al estrecho— ha intensificado patrullajes navales.
La posibilidad de un cierre de Ormuz añade otro frente de incertidumbre en Medio Oriente. Si bien Teherán podría usar la medida como herramienta de negociación, su implementación real desataría una crisis con efectos económicos y geopolíticos impredecibles.