Internacional
Kremlin advierte sobre peligrosa escalada nuclear tras despliegue ordenado por Trump

La tensión entre Rusia y Estados Unidos alcanzó un nuevo nivel este lunes cuando el Kremlin emitió una severa advertencia sobre el reciente despliegue de dos submarinos nucleares estadounidenses cerca de sus fronteras. Dmitri Peskov, portavoz del presidente Vladimir Putin, instó a Washington a evitar lo que describió como “una retórica nuclear imprudente” que podría desencadenar consecuencias impredecibles.
El despliegue ordenado por el presidente Donald Trump el viernes pasado se produjo como respuesta directa a las provocadoras declaraciones del exmandatario ruso Dmitri Medvédev, quien actualmente ocupa el cargo de vicepresidente del Consejo de Seguridad ruso. Medvédev había desafiado abiertamente el ultimátum de Trump para que Rusia detenga su ofensiva en Ucrania, advirtiendo que “cada nuevo ultimátum es un paso hacia la guerra… con Estados Unidos”.
Fuentes del Pentágono confirmaron que se trata de submarinos de clase Ohio, considerados entre los más letales de la flota estadounidense, capaces de transportar hasta 20 misiles balísticos Trident II con ojivas nucleares. Aunque la ubicación exacta de estas naves se mantiene en estricto secreto, analistas militares sugieren que podrían estar operando en zonas estratégicas como el mar de Barents o aguas internacionales del Atlántico Norte.
En declaraciones recogidas por medios internacionales, Peskov subrayó el principio fundamental de que “en una guerra nuclear no hay vencedores”, recordando los acuerdos internacionales sobre no proliferación. El portavoz del Kremlin enfatizó la necesidad de que todas las partes involucradas ejerzan la máxima moderación en su lenguaje y acciones, especialmente cuando se trata de armamento nuclear.
Este intercambio marca el punto más álgido en las tensiones entre ambas potencias nucleares en los últimos meses. Expertos en relaciones internacionales han comenzado a comparar la situación actual con crisis históricas como la de los misiles en Cuba en 1962, señalando que incluso un pequeño error de cálculo podría tener consecuencias catastróficas para la seguridad global.
Mientras tanto, en Washington, la decisión de Trump ha generado reacciones encontradas. Mientras algunos legisladores republicanos han apoyado la medida como una demostración necesaria de fuerza, varios demócratas han anunciado planes para presentar una resolución que limitaría los poderes del presidente para ordenar despliegues nucleares sin aprobación del Congreso.
La OTAN ha convocado una reunión de emergencia para analizar las implicaciones estratégicas de este desarrollo, mientras que en Kiev las autoridades ucranianas monitorean de cerca cómo podría afectar esta escalada verbal al flujo de armamento y apoyo occidental.