Internacional
Met Gala 2025: El Poder del Dandismo Negro como Rebelión Estética

Este lunes 5 de mayo, la Met Gala 2025 abre sus puertas al evento más esperado del año en el mundo de la moda, y lo hace con una temática cargada de historia, estilo e identidad: “Superfine: Tailoring Black Style”. Conocido también como “dandismo negro”, el tema rinde homenaje a siglos de sofisticación, resistencia y expresión cultural a través del vestir.
Una historia tejida con elegancia y reivindicación
La propuesta de este año se inspira en el libro “Slaves to Fashion: Black Dandyism and the Styling of Black Diasporic Identity” de la académica Monica Miller, profesora de Estudios Africanos en la Universidad de Columbia. Su obra es una profunda exploración sobre cómo los hombres negros, a lo largo de la historia, han utilizado la moda no solo como una cuestión de estética, sino como una herramienta política, social y cultural para negociar su lugar en el mundo.
La intención del Costume Institute del MET es clara: destacar al dandy negro desde sus raíces en el siglo XVIII hasta su influencia contemporánea, reconociendo cómo pasó de ser una figura asociada a la esclavitud y la decoración colonial a convertirse en símbolo de autonomía, estilo e innovación global.
¿Qué es el dandismo negro?
El dandismo, en su forma más clásica, surgió en la Gran Bretaña del siglo XIX. Era el estilo de vida del hombre que cultivaba la opulencia, la elegancia y el detalle. No se trataba solo de lujo: se trataba de una declaración de individualidad.
Sin embargo, el “dandismo negro” tiene una dimensión mucho más profunda. Como explica la profesora Miller, es una forma de “reimaginar el yo” en contextos adversos, un acto deliberado de autopresentación que trasciende el vestir: es una estrategia para desafiar las jerarquías raciales, sociales y de clase. Es, en esencia, una forma de humanidad radical.
Leticia García, periodista de El País, lo resume de forma contundente: el dandismo no es solo elegancia, es una herramienta para exigir reconocimiento en el espacio público, especialmente cuando ese espacio históricamente ha negado visibilidad y voz a ciertos cuerpos y culturas.
De “mungos” a íconos de estilo
Para entender la carga histórica del dandismo negro, hay que remontarse a la figura del “mungo”, término despectivo que se usaba para referirse a los esclavos domésticos vestidos de forma ostentosa para reflejar el estatus de sus amos. Pero con el tiempo, esta teatralidad impuesta se convirtió en una forma de resistencia estética.
Julius Soubise, uno de los primeros dandis negros documentados, fue un esclavo liberado que brilló en la alta sociedad británica por su vestimenta extravagante. Su presencia fue, sin proponérselo del todo, una disrupción al orden social.
Desde entonces, cada gesto estilístico del dandismo negro ha sido una forma de subversión. Ya sea una capa exuberante, unas Air Jordan o un kaftán de seda, estos elementos no solo adornan, sino que narran historias de lucha, orgullo y redefinición cultural.
El legado contemporáneo
Figuras como André 3000, Prince o el legendario editor de moda André Leon Talley han llevado el dandismo negro a nuevas alturas. Su estilo no solo captura la atención, sino que transforma significados. En sus manos, una chaqueta hecha a medida o una pajarita no son simples accesorios: son declaraciones de libertad.
A pesar de su influencia palpable en la moda global, los diseñadores negros siguen enfrentando barreras estructurales. Como advierte Leticia García, su visibilidad sigue siendo reducida, aunque sus creaciones han redefinido el panorama estético del mundo entero. El Met Gala 2025 busca, precisamente, reparar esa deuda histórica y abrir paso a una conversación más justa y representativa.
Una gala que celebra la belleza como resistencia
Este año, el Met no solo será una pasarela de trajes espectaculares, sino una reivindicación del poder del vestir como lenguaje, como herramienta de transformación, como símbolo de dignidad. El dandismo negro, más que una moda, es una declaración de existencia.